La 38 edición del Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG) —cuyo Invitado de Honor es Italia—, se vistió de gala con la presencia el director de cine italiano Paolo Genovese. Este 7 de junio, el realizador romano ofreció una master class titulada “The human behind his cinema: Paolo Genovese” / [“El humano detrás de su cine: Paolo Genovese”]. En ella compartió su proceso como cineasta y lo que considera que es la parte humana de sus proyectos.

Ximena Urrieta, directora de Industria y Mercado del FICG, comenzó esta master class dando la bienvenida a todos los que asistieron al evento en la sala 2 del Conjunto Santander de Artes Escénicas. “La master class de hoy me llena de emoción; me parece privilegiado poder escuchar a Paolo Genovese, uno de los cineastas contemporáneos más relevantes”, comentó. Fue una fortuna contar con la presencia de un cineasta tan reconocido, cuyas películas, no solamente se ven alrededor de todo el mundo, sino que también son replicadas y adaptadas en múltiples países. Posteriormente, Urrieta presentó al moderador de la conversación, Andrea Ronin, quien además fungió como intérprete al italiano de algunas preguntas.

Sobre su iniciación en el cine Paolo Genovese compartió que desde niño tuvo ganas de contar historias; que se sentía como una exigencia personal: “Para mí, el cine es compartir la emoción de la historia con los demás”.

También platicó sobre “la fuerza de la idea”. Con el fin de materializar sus historias, fue crucial defender sus ideas. “Tener una visión es un regalo y hay que defenderlo”, comentó. Genovese llegó a ser rechazado en múltiples ocasiones por casas productoras, sin embargo, la clave de su progreso fue el hecho de haber mantenido firme su idea cuando realmente creía en ella. De igual manera, explicó que entender que las historias son subjetivas y que no hay una verdad o calidad absoluta, le permitió expandir sus horizontes y explorar las múltiples maneras que existen de ejecutar una idea. “Las ideas nuevas dan miedo, pero son las que hacen un cambio”, aseveró.

“Es difícil hacer una película que tenga una tipología nueva”. Hoy en día, no es sencillo encontrarse con un género nuevo, muchas historias ya han sido contadas. No obstante, Genovese explicó que es muy importante brindar una perspectiva diferente al momento de contar una historia. Para Paolo, una buena idea de narrativa cuenta con dos características; bondad en la idea y una buena relación con la sociedad. Tal fue el caso de Perfectos desconocidos (2016), película que alcanzó el éxito internacional gracias al “efecto que tuvo sobre el público”.

Genovese explicó que le cuesta contar un tema desde un solo punto de vista; lo de él es ser espontáneo y abordar la historia desde diferentes perspectivas. “Un buen guion es la clave para hacer una buena película”, dijo y añadió que ésa es la manera en que logra crear historias con un valor absoluto y con la capacidad de conectar con el espectador.

El encuentro finalizó con una ronda de preguntas y respuestas con el público, entre las cuales tuvo oportunidad de compartir cómo ha sido su relación con el éxito y con las adaptaciones que han tenido sus películas. “Fue una sensación rara, por una parte, se siente bien, pero por otro, se siente como si hubieran violado tu película”, comentó respecto a las múltiples reinterpretaciones que se han realizado de Perfectos desconocidos, película que alcanzó un Récord Guinness por el número de adaptaciones. Para él, los éxitos son imprevisibles y considera que es absurdo pensar que el éxito de una película radica en el tema ya que —sostiene—, el guion es el manual para la creación adecuada de un proyecto.

Paolo Genovese nació en Roma, Italia, el 20 de agosto de 1966. Después de graduarse de Economía y Negocios en la Universidad de Génova, comenzó su carrera en la empresa publicitaria McCann Erickson, dirigiendo más de cien anuncios y ganando varios premios. En 1998, empezó a colaborar con Luca Miniero como coguionista y codirector del cortometraje El descubrimiento de Walter. El dúo hizo su debut con la comedia aclamada por la crítica IHechizo napolitano. Por su parte, Genovese debutó como director en solitario en 2010, dirigiendo La banda de santas. En 2016, su película Perfectos desconocidos fue premiada por mejor guion internacional en el Festival de Cine de Tribeca y obtuvo también el David di Donatello a la mejor película.