Mucha emoción y hasta una patada de kung-fu fue lo que provocó la alfombra roja de la película Un viaje al corazón: The Wingwalker, el primer estreno con el que contó la edición 39 del Festival internacional de Cine en Guadalajara en sus galas a beneficio.
En la alfombra roja desfiló el elenco de la película, compuesto de actores y actrices como Will Rothhaar, César Ramos, Mercedes Hernández, Héctor Jiménez y London Garza. Pero el momento se lo robó su protagonista, Omar Chaparro, quien con gran simpatía se acercó a hablar con la prensa y a tomarse fotos con sus fans, tras lanzar frente a las cámaras una patada de kung-fu, jugando con el director Alonso Álvarez-Barreda.
“Esta película está inspirada en hechos reales. El personaje que van a ver en la película, interpretado divinamente por Max Arciniega (coescritor de la historia), Rambo, ese personaje existe y está en la cárcel donde estuvo Alonso. Él lo conoció y cuando se contaban historias, muchas de éstas se convirtieron en lo que es Un viaje al corazón”, explicó Omar Chaparro frente a un público cautivado por su carisma.
Esta es la ópera prima del realizador originario de la Ciudad de México, quien ha trabajado en Estados Unidos dirigiendo una docena de episodios de televisión para series como The Mosquito Coast y The Lincoln Lawyer. En The Wingwalker, Omar Chaparro interpreta a un padre viudo que es deportado al mismo tiempo que su hija espera un trasplante de corazón y, desesperado, busca un plan para cruzar la frontera sin importar los riesgos que atraviese.
“Desafortunadamente o afortunadamente, intenté hacer carrera en México y nunca pude. Entonces tengo 18 años en Estados Unidos, aunque el sueño más grande para mí era estrenar la película en México”, compartió Álvarez-Barreda.