
Michel Franco, director de películas como Después de Lucía (2012) y Nuevo orden (2020), se presentó en la sala 2 del Conjunto Santander de Artes Escénicas para dar una clase magistral sobre su visión del cine desde su labor como director.
El realizador enfatizó mucho dentro de su clase magistral Narrar sin concesiones: Una mirada al trabajo que el cine es un trabajo en el que “la visión es de una sola persona”, por lo que, desde su perspectiva, un director de cine debería ser capaz de escribir, producir y dirigir sus obras cinematográficas.
En ese contexto, mencionó que, para él, hacer cine fue un proceso muy natural ya que aprendió realizando dos cortometrajes por semestre, hasta que con su producción, Daniel y Ana (2009), marcó el inicio del estilo que al día de hoy lo caracteriza.
En cuanto al método que ha seguido hasta ahora en sus producciones, confesó que le gusta darles autonomía y libertad creativa a sus actores al momento de grabar, aunque siempre busca trabajar con autores que lo conozcan y entiendan el guión a profundidad.
Asimismo, mencionó que “la constancia es lo que dicta el quehacer”, por lo que algo que lo caracteriza a él como director y a sus obras es mantener a un equipo constante al momento de desarrollar cada proyecto nuevo.
Por último, dijo que el cine mexicano tiene gran diversidad y esencia debido a que los directores mexicanos tienen mucha personalidad, algo que distingue al país y a su cine del resto.